Boletín 210
Apostarle a continuar con la implementación de un sistema de movilidad eléctrica integral que involucre diferentes actores públicos y privados, como alternativa sostenible que reduzca la emisión de partículas contaminantes y de PM 2.5 para mejorar la calidad del aire y de vida en la ciudad, fue el llamado de los Concejales en sesión plenaria.
Al respecto, el concejal Simón Molina Gómez, bancada citante, afirmó que continuar el avance a vehículos eléctricos es un asunto en el que todos tenemos que aportar para mejorar la calidad del aire en Medellín, ya que actualmente el parque automotor que opera con combustibles diésel emana el 80 por ciento de emisiones de PM 2.5 en la ciudad.
Asimismo, afirmó que en Medellín se avanza con la llegada de taxis y buses eléctricos, ecoestaciones de carga, el primer bus articulado de transporte público masivo 100 por ciento eléctrico, estaciones de carga, y la próxima implementación del Acuerdo 72 de 2017 por medio del cual se estimula el uso de bicicletas con pedaleo asistido en el Municipio de Medellín, para facilitar el acceso a los sistemas de movilidad sostenible principalmente a las personas que habitan las laderas.
Resaltó también la implementación de puntos de carga rápida en sitios como Exposiciones, la Avenida Nutibara, Sabaneta, entre otros; y puntos de carga lenta, por parte de EPM.
El Concejal indicó que los retos de ciudad serán incentivar la movilidad eléctrica y la migración individual a vehículos eléctricos, y reducir las emisiones y niveles de contaminación; además implementar alternativas como el cambio del transporte privado a eléctrico, sistemas de alquiler de carros eléctricos y establecer una gran alianza entre el Área Metropolitana y las empresas del Valle de Aburrá para sacar adelante este proyecto.
Por su parte, el concejal Daniel Carvalho Mejía, segunda bancada, afirmo que es pertinente, necesario y estratégico que Medellín sea la capital de la movilidad eléctrica incentivando la financiación de vehículos, los créditos preferenciales y de fácil acceso, tarifas preferenciales de energía, asignación de rutas preferenciales e Iva del 5 por ciento para vehículos eléctricos.
Aseveró que la clave para disminuir la contaminación es cambiar las flotas de buses y taxis a sistemas de movilidad eléctrica, teniendo en cuenta que Medellín tiene 6727 buses, busetas y micros matriculados en la ciudad a abril de 2018; el 19 por ciento del total de los viajes del Valle de Aburrá se realizan en transporte público, sin incluir rutas integradas, “son estos vehículos los que más distancias recorren y deben ser los primeros en brindar mayor eficiencia en movilidad eléctrica”, afirmó.
Propuso que a partir de 2025 se prohíba el ingreso de nuevos buses a diésel, ya que se estima que en 2030 su costo será comparable con el de un bus eléctrico debido al rápido incremento de la demanda; impulsar un mercado de carbono que permita el comercio de emisiones, incentivando la reducción del GEI y declarar un sector del centro como Zona de Bajas Emisiones.
En el mismo sentido, el concejal Ricardo Yepes León Yepes, tercera bancada aseguró que se requieren estrategias que den respuesta a los desafíos de movilidad, los procesos de expansión urbana y el crecimiento del parque automotor que se da de manera incontrolada en el Valle de Aburrá. “El 80 por ciento del material particulado es emitido por el parque automotor, y solo 0.1 por ciento de vehículos matriculados en Medellín son eléctricos e híbridos”, indicó.
En Medellín y el área metropolitana el medio de transporte más utilizado es el bus, por eso el desafío es garantizar la renovación del TPM a buses eléctricos e integrarlos al sistema Metro y Metroplús, ya que cada vehículo eléctrico evita la emisión de cuatro toneladas de CO2 al año y produce cero emisiones de partículas PM 2.5, afirmó el concejal Yepes; además propuso tener doble línea del Metro que evitaría la emisión de 480 mil toneladas de CO2.
Los concejales coincidieron en afirmar que los programas de la Secretaría de Movilidad, EPM, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá y Ruta N marchan en la búsqueda de integrar intersectorialmente la ciudad-región en términos de movilidad sostenible, igualmente, se debe enfatizar en campañas que mejoren los comportamientos culturales para que los ciudadanos entiendan el valor de caminar, montar en bicicleta y dejar el carro de lado.
De la misma forma, brindar especial cuidado en la interpretación de la norma para evitar que los proyectos de movilidad sostenible sufran retrocesos y trazar una política de financiación clara frente a los propietarios de taxis para que accedan a la compra de vehículos eléctricos, no para traer nuevos cupos si no como estímulo a la reposición de los existentes.
Juan Esteban Martínez, representante de la secretaria de Movilidad, expresó que los proyectos de ciudad le apuntan a priorizar el peatón, el transporte público, y la promoción del uso de bicicleta y medios no motorizados; la renovación y modernización del transporte público, y la construcción de ciclorrutas, cicloparqueaderos y redes camineras.
Dentro de los proyectos que impulsa la secretaría de Movilidad está el proyecto piloto de buses eléctricos como alianza interinstitucional en la cual ya se encuentra el primer bus articulado para la línea 1 de Metroplús, y el proyecto piloto de taxis con 1500 vehículos 100 por ciento eléctricos, puntualizó.